El pago por desplazamiento en el sector de la seguridad privada, especialmente para los vigilantes de seguridad, es un tema clave que afecta a muchos trabajadores que deben utilizar su propio vehículo para trasladarse a sus puestos de trabajo o entre diferentes servicios. Para compensar estos gastos, el Convenio Colectivo Estatal de las Empresas de Seguridad Privada establece que las empresas deben abonar una cantidad por kilómetro recorrido.
Actualmente, en 2024, la tarifa habitual de compensación por el uso del vehículo privado es de 0,32 euros por kilómetro. Este pago está diseñado para cubrir el coste del combustible, el mantenimiento del vehículo y el desgaste derivado del uso.
Condiciones para el pago por kilómetro
Este importe se aplica generalmente cuando el vigilante utiliza su vehículo para desplazarse a lugares que no están cubiertos por transporte público o cuando la empresa requiere que se traslade a varias ubicaciones durante su jornada laboral. El pago por kilómetro es aplicable solo si se cumplen las condiciones establecidas en el convenio colectivo, como la presentación de los registros de kilometraje, y suele cubrir tanto los desplazamientos de ida como de vuelta.
Además, algunos vigilantes pueden beneficiarse de compensaciones adicionales, como bonos de transporte o dietas, dependiendo de la política interna de cada empresa y de la región en la que trabajen.
Sin embargo, la cifra de 0,32 euros no está fijada de manera universal, ya que algunas empresas pueden optar por ofrecer mejores condiciones a sus empleados o incluir otros gastos adicionales para que el vigilante no sufra un impacto económico negativo al usar su propio vehículo.